Si eres paciente de Endodoncia debes saber que para lograr un tratamiento efectivo y duradero resulta esencial: la radiografía.
Con ella no solo tu odontólogo podrá confirmar su diagnóstico y valorar la ubicación, forma, tamaño y dirección de las raíces y conductos radiculares sino que tiene la opción de calcular la longitud de trabajo antes de instrumentar, localizar los conductos difíciles o revelar conductos no sospechados así como ayudar a localizar la pulpa calcificada coronalmente.
De ahí que lo aconsejable para estos tratamientos es la realización de al menos cuatro radiografías periapicales:
-La primera para confirmar el diagnóstico
-La segunda para la conductometría (determinar la longitud del diente)
-La tercera para la conometría (comprobar el relleno del conducto radicular)
-La cuarta para el control inmediato (una vez hecho el sellado de los conductos y la obturación)
La quinta, aunque opcional, no es menos importante y debe realizarse para comprobar la evolución favorable de la patología.
El éxito de tu tratamiento odontológico inicia con un buen diagnóstico
Las radiografías dentales son imágenes de los dientes, los huesos y los tejidos blandos alrededor de ellos esencial para que el odontólogo evalúe el estado de los dientes, la boca y la mandíbula así como los llamados senos y arcadas dentales.
Solo se necesitan algunos segundos y sin pizca de dolor, usted podrá obtener un diagnóstico certero en beneficio de su salud buco-dental.
Con la radiografía se diagnostican:
-Caries Interproximales
-Obturaciones desbordantes
-Límite de coronas
-Verifican la existencia de muelas de juicio impactadas
-Se visualizan depósitos tártricos
-Detectan problemas óseos
Conoce el Carestream 8100
Con tecnología francesa de última generación, Plus Imagen dispone para sus radiografías dentales del Carestream 8100, el cual logra en tan solo 10 segundos imágenes de excelencia para un diagnóstico exacto.
De fácil ajuste, admite la posición de “sentado” o “parado”, permite el acceso de silla de ruedas y minimiza la imperfección del funcionamiento. Se adapta al maxilar de cada paciente. La nítidez de la imagen impide la formación de halos oscuros alrededor de las zonas radio-opacas.
Sus programas cubren todas las necesidades panorámicas:
Estándar
Pediátrico
Segmentada
Sin ATM
ATM lateral (2x 4x)
Senos maxilares
2D (exclusivo programa que identifica tanto las impactaciones y lesiones como la relación de la raíz con el nervio alveolal inferior).
Para obtener el tratamiento personalizado que mejor se ajuste a las características de su boca, mordida y alineación es necesario la realización de una serie de estudios previos que permiten a su médico conocer no solo la anatomía de sus dientes sino las particularidades del maxilar, la mandíbula y las estructuras óseas que lo componen así como detectar la causa de los posibles problemas de oclusión.
Los principales exámenes que componen un estudio de ortodoncia para un diagnóstico y tratamiento exacto son:
Radiografía lateral del cráneo o cefalometría: Procedimiento diagnóstico esencial antes de iniciar cualquier tratamiento del área de la ortodoncia, pues permite determinar las anomalías morfológicas, de colocación y de crecimiento de los dientes y a partir de los resultados establecer el tratamiento a ejecutar y su correcto seguimiento.
Radiografía panorámica: captura en una sola imagen la totalidad de las piezas dentales, así como senos maxilares y articulaciones temporomandibulares. Permite conocer el estado de las coronas, raíces dentales, del tejido óseo del maxilar, la mandíbula y problemas de desarrollo dental o las muelas del juicio.
Estudio fotográfico: Las fotografías de la cara del paciente permiten al ortodoncista estudiar las proporciones del rostro y cómo los problemas de oclusión afectan la cara del paciente. Para ello se realizan fotos extraorales (frontal, frontal sonriendo y lateral) y del interior de su boca para complementar el diagnóstico. El estudio fotográfico mostrará también la evolución del paciente y la efectividad del tratamiento.
Los avances de la nueva tecnología marcan tendencia en el campo de las radiografías dentales; siendo un proceso cada vez menos doloroso e invasivo resulta fundamental para obtener tratamientos odontológicos precisos y evaluar su evolución a partir de la comparación de imágenes tomadas en distintas fases del proceso.
Con una mínima exposición a la radiación, la radiografía digital permite ajustar el brillo y contraste de la radiografía, de modo que el menor trastorno capaz de afectar su salud bucodental no pasará de ser percibido.